MENTIRAS

Son realidades tergiversadas, capaz finas que cubren nuestras verdades, esas que por miedo a desnudarnos en público callamos. Un disfraz encantador de nuestras debilidades, y es que a merced de éstas está nuestra  realidad, nos hace ver la mentira como refugio.

Algunas pequeñas, otras grandes; en ocasiones aún empapados de cobardía las hacemos nuestras fieles compañeras. Es la imaginación quien suele darle forma, protegiendo así nuestra inseguridad.

Es un grito atorado entre el silencio, porque nada mejor que el silencio para guardar los gritos del alma. Éstas resultan ser el mejor antídoto contra la cruda realidad, una válvula de escape para no encontrarnos de frente.

Viviendo tras una máscara utilizamos la mentira para generar respuestas automáticas que protejan nuestra intimidad ó disfracen encantadoramente la realidad de nuestra existencia.

Somos la mentira más vigente que existe, el tiempo llegará a desempolvar todo, quizás para sacarlo a la luz o bien sea para convertirlas en una mentira más. Pero sin duda alguna, la verdad llegará acompañada de realidades y fuertes encuentros para mostrarnos que detrás de toda perfección está el defecto.